“Yo conservo la memoria que no morirá jamás
Ni olvido ni perdón ni paso atrás”
“Enfrentamos a un enemigo capitalista que no conoce sino su prepotencia, su hegemonía a costillas del que sea. De los pueblos, de indios, de los barrios, de la mujer, del anciano, del niño, no le importa nada. Lo único que le importa es la explotación, el lucro y nada más. En eso están la oligarquía y el imperialismo empeñados.”
La sociedad colombiana ha sido sistemáticamente golpeada, señalada y masacrada, por las fuerzas militares legales y las paramilitares ilegales que buscan mantener el orden social, para que los ricos estén tranquilos en sus mansiones mientras nuestro vecino compa y amigo pasa problemas. El 16 de mayo traemos a la memoria viva dos hechos fatales, dos masacres, dos acciones de la oligarquía mafiosa y asesina, y renovamos nuestra disposición y nuestro trabajo político, critico, combativo y revolucionario, por el sueño de un país digno para todos y todas.
1984, universidad nacional: El 15 de mayo cae asesinado el compañero Jesús León de la universidad nacional y al día siguiente l@s compañer@s llevaban a cabo una manifestación en contra de la persecución y eliminación de los activistas estudiantiles, en medio de las acciones, los policías encubiertos, los antimotines e incluso los tiras (infiltrados), arremeten contra la comunidad estudiantil, a sangre y fuego se desaloja el campus, las residencias; los policías no contentos con golpear a los estudiantes asesinan a por lo menos una veintena de ellos, aproximadamente 100 son desaparecidos, se cierra la universidad, luego de reabierta, hay reformas estructurales no solo en la parte educativa y administrativa, sino también en la planta física, se amedrenta a los estudiantes de todo el país, que para esos momentos participaban en procesos activos de transformación social y revolucionarios, se trastoca la base misma del movimiento estudiantil, despedazándolo con nubes de pólvora policiaca, acaban con las residencias estudiantiles y el restaurante.
1998, Barrancabermeja: Unidades de la policía nacional entran a un barrio, se van, a los pocos minutos llega un comando paramilitar, se toman a sangre y fuego un bazar, montan a los heridos a los camiones y tratan de ultimar a las personas escondidas en las zonas boscosas, se concreta así la mayor masacre paramilitar en el puerto petrolero.
Estas acciones con más de diez años de ocurridas siguen en la impunidad, el accionar de las fuerzas represoras, se justifica según ellos por la presencia de milicias en barrios universidades y el campo, pero esconden un fin más profundo, detener y destruir los procesos de organización social, cercenar el accionar rebelde y constructor de alternativas de vida digna.
Reiteramos nuestro llamado al combate, a la organización popular y a la construcción y el desarrollo de la insurrección para la toma del poder, la construcción del poder popular y la liberación nacional. El terrorismo de estado ha cobrado bastantes vidas, y la responsabilidad es hasta cierto punto de nosotr@s quienes con nuestra indiferencia permitimos que sucedan estas aberraciones.
“Dime de dónde vienes y te diré dónde vas.
Si no tienes historia futuro no tendrás.
Si no entiendes tu pasado, lo repetirás.
No se puede avanzar sin saber lo que hay detrás.
Yo conservo la memoria que no morirá jamás.
Ni olvido, ni perdón, ni paso atrás.
¿Comprendes? yo no estoy ni ahí con su paz,
Quiero juicio y castigo
Nada menos y nada más”
Contra el terrorismo de estado: Violencia Revolucionaria.
A Estudiar y a luchar por la liberación nacional
WWW.ksr-mr.tk
Ni olvido ni perdón ni paso atrás”
“Enfrentamos a un enemigo capitalista que no conoce sino su prepotencia, su hegemonía a costillas del que sea. De los pueblos, de indios, de los barrios, de la mujer, del anciano, del niño, no le importa nada. Lo único que le importa es la explotación, el lucro y nada más. En eso están la oligarquía y el imperialismo empeñados.”
La sociedad colombiana ha sido sistemáticamente golpeada, señalada y masacrada, por las fuerzas militares legales y las paramilitares ilegales que buscan mantener el orden social, para que los ricos estén tranquilos en sus mansiones mientras nuestro vecino compa y amigo pasa problemas. El 16 de mayo traemos a la memoria viva dos hechos fatales, dos masacres, dos acciones de la oligarquía mafiosa y asesina, y renovamos nuestra disposición y nuestro trabajo político, critico, combativo y revolucionario, por el sueño de un país digno para todos y todas.
1984, universidad nacional: El 15 de mayo cae asesinado el compañero Jesús León de la universidad nacional y al día siguiente l@s compañer@s llevaban a cabo una manifestación en contra de la persecución y eliminación de los activistas estudiantiles, en medio de las acciones, los policías encubiertos, los antimotines e incluso los tiras (infiltrados), arremeten contra la comunidad estudiantil, a sangre y fuego se desaloja el campus, las residencias; los policías no contentos con golpear a los estudiantes asesinan a por lo menos una veintena de ellos, aproximadamente 100 son desaparecidos, se cierra la universidad, luego de reabierta, hay reformas estructurales no solo en la parte educativa y administrativa, sino también en la planta física, se amedrenta a los estudiantes de todo el país, que para esos momentos participaban en procesos activos de transformación social y revolucionarios, se trastoca la base misma del movimiento estudiantil, despedazándolo con nubes de pólvora policiaca, acaban con las residencias estudiantiles y el restaurante.
1998, Barrancabermeja: Unidades de la policía nacional entran a un barrio, se van, a los pocos minutos llega un comando paramilitar, se toman a sangre y fuego un bazar, montan a los heridos a los camiones y tratan de ultimar a las personas escondidas en las zonas boscosas, se concreta así la mayor masacre paramilitar en el puerto petrolero.
Estas acciones con más de diez años de ocurridas siguen en la impunidad, el accionar de las fuerzas represoras, se justifica según ellos por la presencia de milicias en barrios universidades y el campo, pero esconden un fin más profundo, detener y destruir los procesos de organización social, cercenar el accionar rebelde y constructor de alternativas de vida digna.
Reiteramos nuestro llamado al combate, a la organización popular y a la construcción y el desarrollo de la insurrección para la toma del poder, la construcción del poder popular y la liberación nacional. El terrorismo de estado ha cobrado bastantes vidas, y la responsabilidad es hasta cierto punto de nosotr@s quienes con nuestra indiferencia permitimos que sucedan estas aberraciones.
“Dime de dónde vienes y te diré dónde vas.
Si no tienes historia futuro no tendrás.
Si no entiendes tu pasado, lo repetirás.
No se puede avanzar sin saber lo que hay detrás.
Yo conservo la memoria que no morirá jamás.
Ni olvido, ni perdón, ni paso atrás.
¿Comprendes? yo no estoy ni ahí con su paz,
Quiero juicio y castigo
Nada menos y nada más”
Contra el terrorismo de estado: Violencia Revolucionaria.
A Estudiar y a luchar por la liberación nacional
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